Presentación

En el primer período se estableció la estructura y la organización funcional de la Cámara bajo el largo mandato de su primer presidente, Antonio PARAISO (1886-1905), quien la registró como una asociación sujeta a la ley de 1901. En 1923, la sede se trasladó a una de las vías más emblemáticas de la capital parisina, la avenida de la Ópera, donde permaneció durante 73 años.

Durante este periodo, se confirmó el papel de la Cámara en defensa de los intereses españoles en Francia, haciendo oír su voz ante los organismos públicos franceses para comunicarles el punto de vista de sus miembros.

En este sentido, durante la Primera Guerra Mundial, la Cámara contribuyó a evitar la aplicación de la contribución sobre los beneficios extraordinarios de la guerra a los residentes españoles. También intervino en otras cuestiones en defensa de los intereses españoles (mano de obra extranjera, transporte marítimo, acuerdos de pesca, etc.).

El siguiente período corresponde a la Guerra Civil Española, la Segunda Guerra Mundial y la posguerra. Evidentemente, la actividad de la Cámara de Comercio se vio afectada por estos conflictos, debido a las restricciones impuestas al comercio entre Francia y España durante la Guerra Civil y durante la Ocupación, y luego al cese total de este comercio tras el cierre temporal de la frontera en los primeros años de la posguerra.

El presidente Pablo NOLLA (1946-1948) obtuvo el acuerdo de las autoridades francesas para volver a inscribir la Cámara como asociación en actividad a partir de 1948, una vez que se reabriera la frontera. Bajo el mandato de Eduardo MALDONADO (1954-1960), la Cámara de Comercio participó en la redacción del Convenio franco-español de Seguridad Social del 27 de junio de 1957, que facilitó la integración de los trabajadores inmigrantes españoles en materia de protección social.

Se inicia un nuevo período y se alcanza un nuevo punto de inflexión en la década de 1960, con el importante desarrollo del comercio franco-español tras la liberalización y apertura exterior de la economía española (determinada por el Plan de Estabilización de 1959).

El presidente Felipe SÁEZ (1966-1971) impulsó significativamente el aumento del número de socios y su mayor diversificación profesional, intensificó el papel de la Cámara como elemento de apoyo a las empresas españolas en el mercado francés (mayor presencia en ferias y certámenes, asistencia a misiones comerciales y fomento de conexiones individuales con importadores franceses, información permanente a través de una revista mensual de mejor contenido y calidad y la distribución periódica de circulares) y obtuvo el reconocimiento de la Administración española por la calidad de la colaboración con la Cámara.

Este reconocimiento se materializó en una nueva subvención anual a la Cámara destinada específicamente a la promoción de las importaciones españolas, además de la subvención para el equilibrio de sus operaciones, así como la concesión de la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil al presidente por su intensa implicación personal en los trabajos de la Cámara.

Con un nivel de representatividad y prestigio reforzado por estas transformaciones, la Cámara pudo hacer frente, en los años siguientes, al entorno de crisis económica resultante de la crisis del petróleo y de los problemas monetarios generados por la ruptura del sistema de intercambio internacional vigente desde los acuerdos de Bretton Woods en 1944. Su colaboración con la Administración Pública española se institucionalizó en 1979 mediante el Real Decreto del 16 de marzo de ese año, que determinó la misión, organización y medios de las Cámaras de Comercio españolas en el exterior y las puso bajo la supervisión del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.

La entrada de España en la Comunidad Europea marcó el comienzo de un nuevo periodo, impulsando en particular las relaciones económicas franco-españolas, que condujeron a una renovada expansión de las actividades de la Cámara.

El mandato de Juan Antonio CREMADES (1987-1995) se caracterizó por la fusión, en 1993, de la Cámara con su homóloga, la Cámara de Comercio Franco-Española, por la elaboración de nuevos estatutos, por la adopción de una nueva denominación «Chambre Officielle de Commerce d’Espagne en France» con las siglas «COCEF», y por el inicio de negociaciones con las demás Cámaras de Comercio españolas en Europa con el propósito de constituir una federación que reuniera sus medios para acciones comunes. Esta federación, llamada FEDECOM, se crearía en 1998 con sede en Bruselas.

Al presidente Javier ESPAÑA (1995-2005) se le encomendó la tarea de hacer frente a las repercusiones de la crisis económica y monetaria que afectó a España entre 1992 y 1996, y de permitir a la Cámara superarlas mediante una rigurosa reorganización y modernización de su estructura y funcionamiento.

Se hizo hincapié en la intensificación de las actividades de comunicación utilizando la tecnología más avanzada (sitio de Internet) y en el aumento del número de conferencias, seminarios y actos (almuerzos-debates) con eminentes figuras políticas y económicas francesas y españolas. Estas acciones permitieron a la Cámara volver a sus niveles anteriores de representatividad y prestigio.

Su sucesor, Antonio ALONSO (2005-2012), continuó y acentuó esta política de comunicación destinada a dar, en el marco de la misión tradicional de la Cámara, la imagen más positiva posible de la realidad económica y cultural española. Tuvo que hacer frente a las repercusiones de la crisis económica europea a partir de 2010 y adoptar medidas estrictas para preservar la propia supervivencia de la Cámara en un contexto muy adverso.

José Miguel GARCIA (2013-2022) favorece la mejora y renovación de los servicios a través de los cuales la Cámara se esfuerza por dar respuesta a las necesidades específicas de las empresas implicadas en las relaciones comerciales franco-españolas, de acuerdo con la tradicional vocación de esta Institución. La información, el asesoramiento y la asistencia-acompañamiento (en misiones comerciales) son los principales ámbitos de intervención de la Cámara con y para las empresas. Además, ha multiplicado las acciones destinadas a promover las oportunidades de contactos entre empresas francesas y españolas, como el networking “Club Hispania”, el Business Club COCEF, los desayunos-debate sobre temas empresariales profesionales, los premios anuales COCEF (Empresa del año, Entidad del año), la edición de torneos de golf, la creación de una bolsa de empleo que permite establecer contactos entre los demandantes de empleo y las empresas españolas.

Desde el 9 de junio de 2022, bajo la presidencia de la Sra. Christine ALLARD y el Secretario General, el Sr. José Manuel ESCOIN CANO, la COCEF está embarcada en un proceso de modernización e innovación para adaptarse a las necesidades futuras de las empresas españolas y francesas.

Hoy en día, como a lo largo de toda su existencia (135 años hasta la fecha – 2022), la Cámara Oficial de Comercio de España en Francia es un interlocutor oficial e indispensable en la promoción de las relaciones económicas entre los dos países.